La importancia de saber escuchar al cliente

¿Sabías que escuchar a tus clientes es clave a la hora de mantener una relación sana y duradera con ellos? Es necesario aprender sobre sus necesidades, preferencias, hábitos de consumo, qué es lo que no les gusta del producto o servicio, qué les gustaría que se mejorara y la solución que desea. Todos estos factores influyen en la calidad de los servicios que podrías ofrecer.

Con información útil, se planifican estrategias de marketing más efectivas. Como por ejemplo:

Diseñar o modificar productos o servicios de tal manera que se adapten a las necesidades y preferencias del cliente.
Definir precios que vayan acorde a su economía o situación financiera.
Establecer canales de venta que les sean accesibles y prácticos.
Seleccionar los medios publicitarios que más efectividad tengan en ellos.
Redactar mensajes publicitarios que tengan un gran impacto en los clientes.

Al contar con esta información, podrás saber en qué debes mejorar, qué debes cambiar del producto y, en determinados casos, te permitirá diseñar un producto o servicio exclusivo, de acuerdo a la demanda de tu clientela. Para llegar a detectar estas necesidades, tenemos que reunir una serie de requisitos. Sin embargo, es importante que la batería de preguntas elaborada para nuestro cliente no se convierta en un interrogatorio y fluya de una forma natural.

Disposición para ayudar a los demás

Si no posees una clara vocación de ayuda, te será difícil escuchar a tu interlocutor. No disfrutarás haciendo tu trabajo y con el tiempo te generará mucho desgaste y estrés.

Practicar la empatía

La empatía te permitirá ponerte en el lugar de tu cliente. Una persona empática es capaz de “leer” a los demás. No sólo por su lenguaje verbal, sino desde el tono de su voz, su postura, su expresión facial, etc.

Poseer alto grado de curiosidad

Observar detalles de su entorno y obtener información interesante sobre el negocio que maneja tu cliente, hará que se sorprenda y sienta interés por mantener contacto contigo. Además, se sentirá comprendido y escuchado.

Ser sociable y positivo

Siempre te puedes llevar un gran recuerdo de alguien que tenga una actitud positiva. Una persona sociable y de buen humor es capaz de transmitirte un mensaje con metáforas y ejemplos divertidos, ya que son más fáciles de retener.

En conclusión, siempre debemos estar atentos a las opiniones, comentarios, sugerencias o quejas de nuestros clientes. Aunado a esto, siempre debemos tratar de descifrar o recabar información sobre ellos, tal como sus necesidades, preferencias y hábitos de consumo, a través de, por ejemplo, pequeñas encuestas o entrevistas.

Con esta información, podremos estructurar estrategias de marketing más efectivas. Asimismo, sabremos qué detalles debemos trabajar o qué cosas debemos cambiar de nuestro servicio. Si consideras que necesitas potenciar algunas de estas habilidades, te recomiendo contactarnos. En Asesores Balor, ofrecemos coaching ejecutivo y coaching personal.